El artista cántabro exhibe en la ciudad alemana una selección de sus últimos cuadros y una muestra inédita de su incursión al mundo de la escultura
Guillermo Balbona | El Diario Montañés
Los trazos del pintor cántabro Rafael Muro son parte de la propuesta expositiva de esta primavera en Alemania. Muro (Santander, 1955) protagoniza una doble cita expositiva en Hamburgo, donde despliega durante este mes una selección de sus últimas pinturas así como una serie inédita de sus trabajo en el mundo de la escultura. Los lugares son la Galería Atelier Ibellart y en el Instituto Cervantes, que acogerá en otra exposición hasta el 3 de junio, el universo pictórico del artista cántabro en su sede de Chilehaus, un emblemático edificio de la ciudad por su imponente arquitectura.
El pálpito artístico de Hamburgo resuena por todo Alemania. Por su calles convive la creación que emana de las más de 50 galerías de arte privadas. Y entre ellas, una amplia red de instituciones que actúan como una caja de resonancia con la programación de proyectos y numerosas citas culturales a lo largo de todo el año.
En este contexto, Muro presenta una parte de su trabajo hasta ahora desconocido e inédito, sus esculturas: piezas realizadas con diversos materiales como metacrilato, productos textiles, pigmentos y barnices, y que se erigen como un complemento de su pintura.
Presente en 1995 en Artesantander y en la Feria de Arte Internacional de Holanda con la Galería José Cataluña, Muro confiesa que ha querido llevar su trabajo de lo bidimensional a lo tridimensional, «trasladando de alguna forma mi pintura a las esculturas fruto de un riguroso trabajo de investigación, en donde desempeñan un papel muy importante las formas y cobran gran protagonismo los materiales». Al igual que en la pintura hay una «simplificación de elementos, colores y formas donde los espacios interiores crean formas habitadas».
Muro, que recientemente expuso su obra en el Centro de Adultos de Santander bajo el epígrafe de 'El silencio de la mirada', comisariado por Luis Alberto Salcines, presenta ahora en Alemania una selección de sus últimas obras pictóricas en las que vuelve a demostrar su fidelidad al concepto del color y a su forma de concebir el arte. Sus pinturas, acrílicos sobre tela en los que reflexiona sobre determinados aspectos de la pintura: materia, colores, manchas, texturas y líneas, conforman unos universos particulares que dan personalidad propia a la obra. Su obra ha evolucionado durante estos años, y aunque sus formas son abstractas, dejan atisbar determinados mundos en los que las referencias a formas orgánicas están presentes.
El artista ha sido galardonado con varios premios de pintura entre los que destaca el del Concurso Nacional Casimiro Sáinz de Reinosa, en 2008, y finalista del Concurso Internacional de Pintura Focus-Abengoa de Sevilla, en 2004. Ha protagonizado varias exposiciones individuales así como diversas colectivas, participando en varios talleres de pintura como el organizado por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, impartido por Juan Uslé y Vicky Civera. Además ha estado presente en proyectos artísticos como Plenilunio. Su obra se encuentra presente en varias colecciones tanto públicas como privadas.
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